Están Sánchez y su tropa de maleantes que no les cabe un cacahuete en salva sea la parte, pero no se si de alivio o de canguelo. O de ambas cosas a la vez. Porque fue Ábalos al Tribunal Supremo y en lugar de ‘cantar’, tiró balones fuera como un descosido, juró que lo de Aldama es mentira y convirtió a su secuaz Koldo en el chivo expiatorio de todas sus tropelías y mangancias. El ex número 2 del marido de Begoña, ex ministro de Fomento del Gobierno Frankenstein y ex secretario de Organización del PSOE se presentó ante el juez y la prensa adicta al régimen como un pobre ciudadano engañado por un pérfido guardaespaldas, que le consiguió una casa en Cádiz, que según Ábalos tenía la piscina estropeada, y que el perejil de todas las corruptas salsas socialistas pagase el alquiler del lujoso picadero donde vivía su novia. Por no acordarse, no se acordó ni de su firma y ni siquiera reconocía su letra. Lo niega todo, culpa a Koldo y exculpa al Gobierno Sánchez por el momento. Digo de momento, porque este lunes vuelve Aldama a los juzgados y veremos que cuenta y que nuevas revelaciones aporta. Y un día después le llega el turno a Koldo, aunque ahí no habrá novedades. Ha cerrado el mostrenco un acuerdo con su antiguo protector y jefe, por el que asumirá toda la responsabilidad en el affaire de las mascarillas y en lo que salte. Y lo hace el muy zoquete porque le han prometido ‘protección’. Puedo hasta reproducir como fue la conversación y lo que le dijeron, cuando se quejó mohíno de lo mal que lo esta pasando y de los sombrío que pinta el panorama. “Ni te preocupes Koldito, que nosotros te arropamos; si Chavez y Griñán ni siquiera...
The post Alfonso Rojo: “Koldo es grandón pero no tiene cuerpo para tapar toda la corrupción de Ábalos y el PSOE” appeared first on Periodista Digital.