Dicen algunos que el vídeo es un fake, aunque de serlo está muy bien hecho. Allá cada cual. Circula por las redes menos convencionales, y en el mismo un curioso sujeto se lanza a unas arenas movedizas cercanas a un lago -no se sabe dónde- con el ánimo de «dar una lección» y enseñar así cómo salir airoso de una situación semejante. El resultado no puede ser peor: acaba siendo tragado por mucho que intenta salir. Ver para creer. Las arenas movedizas, también conocidas como lodazales o pantanos movedizos, son áreas de suelo saturado con agua, arcilla y sedimentos, que tienen la apariencia de un sólido, pero en realidad son un líquido viscoso. Composición: Aunque se llaman «arenas movedizas», no están compuestas principalmente de arena. Suelen consistir en una mezcla de arcilla, sedimentos, agua y materia orgánica. Viscosidad: La apariencia sólida de las arenas movedizas es engañosa. Su viscosidad es tan alta que, aunque parecen sólidas, en realidad son un líquido espeso. Esto se debe a la presencia de agua entre las partículas del suelo, lo que dificulta la separación de estas partículas y crea una sustancia pegajosa. Riesgo de hundimiento: El peligro de las arenas movedizas radica en la posibilidad de que una persona o animal se hunda en ellas. Si alguien camina sobre una capa superficial más sólida, puede romperse y hundirse en la capa más fangosa debajo. Flotación: Aunque el término «movediza» sugiere peligro inminente, una persona no se hundirá indefinidamente en las arenas movedizas. La densidad del cuerpo humano es menor que la de estas sustancias, lo que puede permitir que una persona flote en la superficie. Ubicación geográfica: Las arenas movedizas pueden encontrarse en diversas partes del mundo, pero son más comunes en áreas con suelos arcillosos y húmedos, como pantanos y zonas costeras. Mitología...
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