Mientras Sánchez está de gira por China, defendiendo supuestamente las virtudes del ganado porcino, su parienta parece que se ha ido con las niñas a Bristol. Supongo que a tomar aire en la costa sur de Inglaterra, a la espera de que el juez Peinado la haga peregrinar de nuevo a los juzgados. Por cierto que sigo a la espera de que alguien, con dos dedos de frente, una pizca de dignidad y algo de peso, le pida cuentas a Sanchez por lo que soltó en el Comité Federal del PSOE. Cuando digo ‘alguien’ no me refiero, por supuesto, a la Universidad, al mal llamado ‘mundo de la cultura’, a los millonarios directivos del Ibex 35, a los prelados de la Iglesia, a las asociaciones profesionales o al periodismo pesebrista. Pero alguna voz con prestigio, en la Judicatura, la Unión Europea o dónde sea debería alzarse para calificar como merece ese anuncio hecho por el amo del PSOE el pasado sábado, según el cual esta decidido a seguir tres años chupando del frasco ‘con o sin el concurso del Parlamento’. Es lo más aberrante que se ha escuchado a un ‘okupante’ de La Moncloa en 50 años: una flagrante amenaza al sistema democrático; el fin de la separación de poderes, ya en peligro por el asalto progresivo que el Ejecutivo socialista perpetra contra la Justicia. Sánchez, que perdió las ultimas elecciones y llegó al cargo aupado por proetarras vascos y golpistas catalanes, se aferra a la Presidencia como un guacamayo a la percha. Le importa un comino que no se aprueben leyes o carecer de presupuestos, porque para él, como para sus compinches, gobernar se limita a pasearse en Falcón, hacerse fotos y colocar parientes y amiguetes a cuenta del erario público. Se lo dejó este pasado sábado a sus...
The post Alfonso Rojo: “El golpe de Estado de Sánchez y las rodillas despellejadas de los pringados del PSOE” appeared first on Periodista Digital.